Pan de Bono: Una Delicia colombiana que no te puedes perder

El pan de bono es un distintivo panecillo, muy reconocido en la ciudad de Cali, más específicamente en el departamento del Valle del Cauca y un claro ejemplo de la riqueza gastronómica de la región. Este bocadillo, que se ha mantenido a lo largo de los años, convirtiéndose en un verdadero estandarte de la identidad colombiana.

Su consumo puede presentarse como acompañamiento, refrigerio e incluso en el desayuno. Es caracterizado por mantener un sabor salado y una textura suave que lo diferencia de los demás panes.

En este artículo, conocerás cómo preparar y disfrutar de este acompañante típico colombiano.

Historia Pan de bono

Originario en el Valle del Cauca y a pesar de no tenerse una certeza exacta de la fecha en que fue fabricado, se estima que surgió entre los años 1800 a 1900. Su nombre podría derivar del “Bono”, un pueblo en esta región, o del término italiano “buono”, que significa “bueno”.

Inicialmente, se preparaba dentro de las viviendas del valle en hornos de leña, siendo consumido tradicionalmente en los desayunos junto a un chocolate caliente. Fue tanta su popularidad que se extiende más allá del Valle del Cauca y se estandarizó dentro de la gastronomía colombiana.

El pan de bono se elabora con ingredientes accesibles y básicos que le otorgan su textura esponjosa y su sabor sutilmente salado característico. Compuesto por queso, almidón de yuca, harina de maíz y huevos. Al pasar el tiempo, hay quienes han experimentado con las recetas moderadamente, agregando productos como leche o azúcar, dando un toque distintivo en su sabor.

Ingredientes para su preparación

1 taza de almidón de yuca o fécula de mandioca.
1/2 taza de harina de maíz precocida.
1 taza de queso costeño o queso blanco rallado.
1 huevo.
1/4 de taza de leche según la textura de la masa.
1 cucharadita de polvo para hornear.
1 pizca de sal, si el queso no es muy salado.

Preparación para un delicioso Pan de bono

La preparación del pan de bono es más sencilla de lo que se cree; te explicaremos detalladamente cómo realizar la elaboración de esta delicia representativa de la gastronomía colombiana.

Se inicia precalentando el horno a una temperatura de 180 °. En un recipiente grande se integran la mezcla de almidón de yuca, la cucharada de polvo y una pizca de sal. Se le añade el queso rallado, combinándolo bien, buscando integrar todos los ingredientes.

Después añadimos el huevo y un poco de leche, mezclando de forma continua hasta obtener la masa. Verifica que sea suave y moldeable; si notas que no es manejable, agrega más leche teniendo cuidado en no agregar de más, para que no quede viscosa.

Utilizas una bandeja para hornear, previamente engrasada y cubierta con papel para hornear. Coloca la masa en forma de bolitas pequeñas, dejando su respectivo espacio para que la masa crezca. A continuación, dejaremos horneando durante 20 a 25 minutos, hasta que visualices que los panes estén dorados y ligeramente inflados.

Sácalos del horno y sírvelos calientes, ideales para acompañar con una taza de chocolate o café.

 

Te invitamos a degustar este tradicional panecillo colombiano

El pan de bono va más allá de ser un simple panecillo; es un icono llamativo de la tradición y cultura en Colombia. Nos evidencia las habilidades de las personas del Valle del Cauca, quienes crearon algo único; una conexión directa con la riqueza culinaria del país y la cocina tradicional, donde los sabores se convierten en experiencias únicas. Incluso nos resalta los ingredientes locales y la importancia que tienen en la cocina regional, como lo son la yuca y el queso.

Te invitamos a disfrutar de este delicioso alimento. Atrévete a sumergirte en esta tradición, puedes buscarlo en panaderías o, si deseas, prepararlo en casa con un resultado que siempre valdrá la pena. Cada porción es un recordatorio de la gastronomía local y de cómo un pan puede llegar a ser tan representativo, llevando cultura, historia y sabor.