El Salto de Tequendama es uno de los lugares naturales más reconocidos en Colombia, ubicado en el municipio de Soacha, a pocos kilómetros de Bogotá. Esta cascada, que cae desde una altura aproximada de 157 metros, ha sido un punto de referencia en la geografía colombiana desde tiempos precolombinos.
Ubicación y Acceso al Salto de Tequendama
El Salto de Tequendama se encuentra en el municipio de Soacha, Cundinamarca, a unos 30 kilómetros al suroeste de la capital colombiana, Bogotá. La cascada es accesible desde la ciudad mediante diferentes rutas de transporte. Para quienes viajan en vehículo particular, la ruta más directa es a través de la Autopista Sur, siguiendo por la carretera Soacha-Mesitas del Colegio hasta llegar al sitio. También existe la opción de tomar transporte público desde Bogotá, con buses que salen desde el terminal de transportes y que se dirigen hacia la región de Tequendama.
El acceso al Salto de Tequendama es relativamente sencillo, pero es recomendable prever tiempo adicional durante los fines de semana o festivos, cuando la afluencia de visitantes suele aumentar. La proximidad a Bogotá hace que sea un destino popular para salidas de un día, lo que incrementa la demanda en ciertas épocas del año.
Historia del Salto de Tequendama
En la época prehispánica, este lugar tenía un profundo significado espiritual para la cultura Muisca. Según las leyendas, la cascada fue creada por Bochica, un dios que, en respuesta a las súplicas de los Muiscas, rompió una roca con su bastón para drenar las aguas que inundaban la sabana de Bogotá, dando origen al Salto de Tequendama.
Durante la época colonial y en los siglos siguientes, el Salto de Tequendama se consolidó como un destino turístico de interés para nacionales e internacionales, fascinados por su imponente caída de agua y su entorno natural y a lo largo de los años, este sitio ha sido objeto de numerosas investigaciones geológicas, debido a su relevancia en la formación de la geografía de la región.
Otro elemento histórico de gran importancia es la Mansión Tequendama, una mansión que data de la década de 1920 y que originalmente funcionó como un hotel. Actualmente, esta construcción posee el Museo Casa Salto de Tequendama, donde se exhiben colecciones que exploran tanto la historia del lugar como su impacto, ofreciendo a los visitantes una perspectiva sobre el entorno natural y cultural del Salto de Tequendama.
Características Naturales
La cascada forma parte del río Bogotá, que a su paso por esta zona despliega un caudal que varía significativamente según la temporada, con su mayor volumen de agua observado durante la época de lluvias.
El entorno natural que rodea al Salto de Tequendama es igualmente notable. El área está caracterizada por una densa vegetación y un ecosistema que incluye una diversidad de flora y fauna típicas de la región andina. Entre la vegetación predominan especies de árboles y plantas que prosperan en ambientes húmedos y que contribuyen a la riqueza ecológica del lugar. A pesar de la belleza natural del Salto, es importante mencionar los problemas ambientales que han afectado la calidad del agua, principalmente debido a la contaminación del río Bogotá, lo cual ha generado preocupación y esfuerzos de restauración ambiental.
El Salto de Tequendama es un lugar emblemático que vale la pena conocer. Es un plan ideal para un día fuera de la ciudad, combinando naturaleza e historia en un solo lugar.
