En la ciudad de Bogotá, el Mercado de las Pulgas de San Alejo, el Mercado de las Pulgas de Usaquén y el Paseo de Rivas surgen como espacios culturales que atraen a los curiosos y amantes de lo auténtico.

A continuación, conocerás 5 datos interesantes sobre este mercado en Bogotá.

1. Historia y relevancia de los Mercados de las Pulgas en Bogotá

Los Mercados de las Pulgas de Bogotá tienen sus raíces en la necesidad económica y en la pasión por preservar el legado cultural.

El Mercado de las Pulgas de San Alejo (el más popular), abrió sus puertas en la década de los 80, y desde entonces ha crecido para convertirse en un tesoro de tesoros históricos y tradiciones. Este mercado, junto con el Mercado de las Pulgas de Usaquén y el Paseo de Rivas, se posicionan como un punto de historia y curiosidades. Tanto así que han sido nombrados desde 2005 patrimonios culturales de Bogotá.

2. Experiencia en los Mercados de las Pulgas de Bogotá

Cada domingo y lunes festivo, los Mercados de las Pulgas de Bogotá despliegan su encanto desde las 9 de la mañana hasta las 5:30 de la tarde. Los más de 300 stands comerciales ofrecen una amplia gama de tesoros y curiosidades: desde elementos de los siglos XIX y XX hasta objetos modernos y usados.

Esta experiencia es una inmersión en la riqueza de la cultura local, una oportunidad para explorar antigüedades, libros, juguetes y otros objetos que capturan la esencia de Bogotá.

3. Artesanos y Gastronomía

Los Mercados de las Pulgas de Bogotá destacan por su variada comunidad de artesanos, quienes comparten su talento y creatividad a través de sus creaciones únicas.

Las artesanías y objetos hechos a mano ofrecen una visión de la destreza de los creadores locales y de sus esfuerzos por mantener viva la tradición. Además, la gastronomía típica que tiende a verse alrededor de estos puntos, llena el aire, añadiendo una dimensión gastronómica a la experiencia.

4. Comercio y Sostenibilidad de los Mercados de las Pulgas de Bogotá

Los Mercados de las Pulgas de Bogotá son gestionados por asociaciones sin ánimo de lucro, como la Asociación del Mercado de Pulgas San Alejo.

Estos mercados no cuentan con subsidios estatales ni terrenos propios; en su lugar, deben alquilar espacios como el parqueadero en donde actualmente se encuentra el mercado de San alejo (Carrera 7 No. 24-70). A pesar de los desafíos, los comerciantes han logrado mantener vivo el espíritu de estos mercados. Cada fin de semana, los puestos se arman rápidamente, ofreciendo a los visitantes la oportunidad de explorar productos únicos y auténticos.

5. Contribución Cultural y Vínculo Comunitario

Los Mercados de las Pulgas de Bogotá no solo son espacios de comercio, sino también centros de encuentro cultural y comunitario.

Estos lugares despiertan el interés de los visitantes al ofrecer una mirada al pasado y al presente de la ciudad. Los comerciantes aportan a la escena cultural, creando un ambiente visual de obras a pequeña escala. Esto junto a la gastronomía, la música en vivo y ciertas actividades temáticas complementan la experiencia, brindando un ambiente enriquecedor de tradición, creatividad y comunidad.

Estos mercados no solo son destinos para los amantes de antigüedades, sino también destinos para los turistas que buscan conexiones auténticas con la rica historia y la comunidad capitalina.